Cómo guardar bulbos durante el invierno

Muchos bulbos que tenemos en el jardín de primavera y verano, no soportarán las inclemencias del invierno... Aprende cómo guardar bulbos correctamente, paso a paso.
Cómo guardar bulbos durante el invierno

Redacción: Silvana M

Actualizado: 06/12/2023

Guardar bulbos y conservarlos correctamente

En todas las áreas, salvo aquellas que son muy cálidas, muchos bulbos, cormos, rizomas y tubérculos de floración veraniega u otoñal deben ser almacenados o protegidos, ya que no tolerarán las heladas de invierno y la congelación del suelo. Con un poco de práctica, guardar bulbos durante el invierno, es una tarea puede realizarse con bastante facilidad y además, te permite cultivar muchas plantas bulbosas que, de no protegerse, serían inviables en tu zona.

A diferencia de los bulbos resistentes, que necesitan de un período frío a fin de florecer, estos “bulbos blandos” no manejan bien el frío y deberían ser desenterrados, almacenados y protegidos sobre todo en los climas con inviernos más crudos. En nuestra nota de hoy, entonces, aprenderemos como guardar bulbos blandos durante el invierno, para su posterior plantación durante la primavera.

Los bulbos blandos que pueden necesitar ser guardados o protegidos durante el invierno, incluyen los siguientes:

Gladiolus murielae

Acidanthera bicolor o Gladiolo de Abisinia

Gladiolus murielae

Cormo

USDA 7

Hippeastrum

Amarilis

Hippeastrum

bulbo

USDA 9 (Puede florecer en el interior en invierno)

Caladium

Caladium

Caladium sp

Tubérculo

USDA 9

calla

Cala

calla sp

rizoma

USDA 7

Canna

Canna

Canna sp

Rizoma

USDA 7

Dahlia

Dalia

Dahlia sp

raíz tuberosa

USDA 8

Alocasia

Oreja de elefante

Alocasia sp

Tubérculo

USDA 9

Gladiolus

Gladiolos

Gladiolus sp

Cormo

USDA 8

Begonia x tuberhybrida

Begonia tuberosa

Begonia x tuberhybrida

Raíz tuberosa

USDA 10

Anemone Coronari

Anémona

Anemone Coronari

Tubérculos

USDA 6

Desenterrar y guardar bulbos durante el invierno

  1. bulbos desenterradosA medida que el clima se enfría, el follaje de los bulbos blandos comenzará a ponerse amarillo. Esto sucede a menudo luego de una helada ligera pero antes de una helada cruda. Este es justo el momento de desenterrarlos, antes de que sean dañados por la congelación del suelo, pero es importante que el follaje se haya secado casi por completo, ya que las hojas son las encargadas de transmitir los nutrientes a los bulbos de modo que puedan volver a florecer. Si cortas todos el follaje cuando aún está verde, lo más probable es que el bulbo, rizoma o cormo aún no haya acumulado suficientes nutrientes.
  2. Para hacerlo, debemos cavar suavemente el suelo alrededor de la planta, procurando hacerlo a una distancia de varios centímetros, lejos de ella, de modo de no lastimarla. Puedes utilizar una horquilla o una pala para retirar, con mucho cuidado, la planta de su lugar; siempre teniendo la precaución de no lastimar el bulbo principal o sus raíces.
  3. limpiar bulbosAhora es el momento de limpiar los bulbos para guardarlos. Podemos utilizar un pincel para ayudarnos a retirar toda la tierra que los cubre. Y seguidamente, tenemos dos opciones:
    1. Hay quienes los lavan y dejan secar fuera del sol y del viento por uno o dos días, con el consecuente peligro de que queden húmedos y se pudran.
    2. Y hay quienes no los mojan para evitar el riesgo de pudrición.
  4. El siguiente paso antes de continuar, es eliminar cualquier bulbo o tubérculo que presente signos de pudrición, se vea arrugado o tenga agujeros, generalmente producidos por algún bicho. Estos bulbos en mal estado deben desecharse ya que de lo contrario podría enfermar a sus “compañeros”.
  5. Otra práctica que puede ser opcional, es aplicar algún fungicida antes de guardar bulbos. Si aplicamos un fungicida líquido, deberemos dejarlos secar por uno o dos días al igual que si los hubiésemos lavado. Si aplicamos un fungicida en polvo, ya se pueden guardar.
  6. formas guardar bulbosEn este punto, la mayoría de los bulbos y tubérculos están listos para ser almacenados, sin embargo, algunos necesitan ser “curados” como los bulbos de gladiolos, cala, Acidanthera, Crocos, fresia, tigrida y tritonia. Para curar los bulbos lo que haremos será colocarlos en una bolsa de red (similar a las de cebolla) o podemos improvisar una bolsa con una tela de tul, lo importante aquí es que se “aireen” es decir, que circule el aire entre ellos. Colgaremos esta bolsa llena de bulbos en un lugar sin sol, que tenga temperaturas de alrededor de 27 ºC durante un período de tres semanas, pasado este tiempo, ya podemos proceder a su almacenamiento. El lugar ideal es sin duda en interior.
  7. No debes olvidar etiquetar tus plantas. Cuando llegue la primavera, tal vez te sea difícil recordar que es qué y mucho menos de que color son. Es por ello que etiquetarlos en una buena ida. Para bulbos grandes, podemos escribir suavemente sobre ellos con un marcador permanente o atar (suavemente también) una etiqueta. Los bulbos más pequeños pueden ser guardados en bolsas de papel (nunca de plástico) y escribir el nombre en ellas.
  8. otra forma de guardar bulbosPodemos utilizar cajas de madera o cartón para guardar bulbos durante el invierno. Pero es importante saber que los bulbos no deben tocarse entre sí y deben permanecer aireados, para ello, utilizaremos un medio de embalaje o soporte como musgo de turba, vermiculita o papel periódico. Una vez colocado esto, iremos acomodando los bulbos, sin que se toquen; si tenemos muchos, haremos una segunda capa, siempre separándolos con una fila de papel periódico o lo que hayamos elegido.
  9. Estos recipientes o cajas que contienen todos nuestros bulbos, deben ser guardados en un lugar fresco y seco, con una temperatura de alrededor de 10º C. Un sótano sin calefacción o el garaje suelen ser lugares apropiados. Siempre recuerda que el lugar que elijas nunca debe tener temperaturas bajo cero.
  10. Revisa tus bulbos varias veces durante el invierno y desecha todos aquellos que estén arrugados o blandos y elimina cualquier material de embalaje que se note mohoso o en mal estado. Algunos jardineros suelen humedecer levemente (y hago hincapié en “levemente”) el material de embalaje (el papel o la turba) de modo que los bulbos no se arruguen.

Proteger los bulbos del invierno convirtiéndolos en plantas de interior

bulbos en interiorSi lo deseas, en vez de guardar bulbos, puedes simplemente plantarlos en macetas y llevarlos dentro de casa.

Muchos bulbos blandos no tendrán ningún problema en sobrevivir en interiores, aunque su crecimiento y floración tendrá su propio ritmo, salvo que los forcemos.

Las plantas en general son muy sensibles a las condiciones de luz, temperatura y humedad, condiciones que determinan su floración pero que son difíciles de controlar.

Replantar los bulbos en primavera

En la primavera, una vez que los peligros de heladas ya han pasado y el suelo esté cálido, podemos volver a plantar nuestros bulbos. También es un buen momento para dividirlos si es necesario. Una buena alternativa, es plantarlos en macetas y en interiores al comienzo de la primavera y moverlos al aire libre cuando el clima ya sea el apropiado.

RESUMEN PARA GUARDAR BULBOS

  • Esperar que el follaje se haya secado y desenterrar los bulbos
  • Limpiarlos bien, tratarlos con fungicida y airearlos un poco
  • Embalarlos en una caja de cartón utilizado un material de embalaje como papel periódico y colocarlos de modo que no se toquen entre si
  • Guardar la caja en un lugar fresco y seco alejado de la calefacción
  • Revisa los bulbos varias veces durante el invierno y desecha los que se vean en mal estado

Cómo guardar bulbos durante el invierno

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