Almacenar y recoger semillas de nuestros propios cultivos de hortalizas y hierbas es una gran forma de ahorrar y perpetuar tus variedades favoritas año tras año.
Las variedades de polinización abierta son las mejores candidatas para recoger semillas y conservarlas. A diferencia de los híbridos, estas variedades son más propensas a mantener sus rasgos genéticos de generación en generación.
Algunas especies de cultivos tienden a polinizarse a sí mismos (autopolinización), mientras que otros precisan de la intervención de insectos o del viento para obtener el polen de las flores cercanas (polinización cruzada). Los guisantes, la lechuga y los tomates, por ejemplo, se polinizan a sí mismos y es poco probable que se produzca una polinización cruzada, aun cuando diversas variedades estén creciendo muy cerca.
En aquellos que son de polinización cruzada, como por ejemplo las calabazas y las cebollas, la pureza genética solo puede asegurarse cultivando solo una variedad de forma completamente aislada o en invernaderos, de modo tal que evitemos la contaminación. Igualmente, este tipo de cultivo aislado suele ser viable más de manera profesional que para los jardineros hogareños ya que precisamos de bastante espacio.
A la hora de recoger las semillas de la huerta es importante elegir aquellas plantas que están más sanas y resistentes, y buscar aquellas con los rasgos que nos gustaría preservar. En aquellos cultivos donde el espigado temprano o la floración no es algo que deseemos, como en la lechuga o la albahaca, recogeremos semillas solo de aquellas que son más lentas en florecer.
Un poco más adelante en el artículo hablaremos de las técnicas para recoger semillas de algunas hortalizas y hierbas más comunes, pero antes son importantes algunos consejos a tener en cuenta una vez que ya hayas hecho tu recolección:
- Asegúrate de que las semillas recogidas estén completamente secas antes de almacenarlas o envasarlas ya sea en frascos o sobres de papel.
- No olvides etiquetar los envases con la variedad y la fecha en la que has recogido las semillas.
- Guárdalas siempre en un lugar fresco y seco para mantener su viabilidad hasta la próxima siembra.
Formas de recoger semillas
en hortalizas y hierbas
Semillas de Guisantes
Por lo general los guisantes de autopolinizan correctamente a menos que crezcan inmediatamente al lado de otra variedad de guisantes; lo ideal es aislar las diferentes variedades por al menos una distancia de entre 3 a 6 metros.
Para recoger semillas de guisantes debemos dejar que las vainas se sequen completamente en la misma planta.
Aunque cabe mencionar que, en climas extremadamente húmedos, muchas veces es necesario cosechar las vainas aun maduras y dejarlas secar en el interior; una vez que se han secado completamente, entonces abrimos las vainas a mano y retiramos las semillas.
Para obtener semillas de los frijoles se puede usar la misma técnica.
Recoger semillas de Albahaca
Las semillas de albahaca se obtienen a través de la polinización cruzada producida por las abejas, si queremos mantener más pura la variedad, deberemos aislarlas por 45 metros o más.
Dejaremos que las cabezas de semillas se sequen en la planta. Una vez secas, simplemente “agitaremos” o “desmenuzaremos” las cabezas de semillas dentro de un sobre papel, de este modo, logramos que caigan las semillas, podemos soplar cuidadosamente para eliminar la pelusa.
Recoger semillas de Lechuga
Por lo general se autopoliniza, aunque ocasionalmente puede ser víctima de una polinización cruzada hecha por varios insectos, si queremos preservarla, deberemos aislar las diferentes variedades por al menos 3 a 6 metros.
La floración y la maduración de una sola cabeza de semillas se prolonga por hasta cuatro semanas, lo cual hace que no podamos recoger semillas de lechuga de una sola vez.
La forma de recolectarlas es “sacudir” las cabezas de semillas, sin quitarlas de la planta, en una bolsa de papel o sobre varios papeles dispuestos en el suelo, este procedimiento deberemos repetirlo cada 3 o 4 días.
Otra técnica es cortar una cabeza de semillas a la mitad de su proceso de maduración y dejarla secar en el interior durante una semana, luego simplemente frotamos entre las manos para “liberar” las semillas. Retiramos la pelusa soplando suavemente.
Semillas de Puerro y Cebolla
Tanto los puerros o cebollas de verdeo como las cebollas comunes son polinizadas de forma cruzada por insectos, por lo tanto, si queremos preservar las variedades deberemos aislarlas por al menos 1500 metros, (aunque no se cruzan entre puerro y cebolla, es decir, aislamos las diferentes variedades de cebolla común, pero podemos plantarlas junto a los puerros).
Tanto las cebollas como los puerros son bienales, por lo tanto las flores, y por ende las semillas, aparecerán recién en la segunda temporada de crecimiento.
Los puerros, que en la mayoría de las zonas son resistentes al frio, salvo en las muy extremas, se pueden dejar en el jardín con un mulching de pajote para que florezcan en la próxima primavera.
Las cebollas son menos resistentes así que deberíamos elegir los mejores bulbos para que pasen el invierno almacenados y poder volver a plantarlos en la primavera.
Una vez que hayan florecido y se hayan formado las cabezas de semillas, las dejaremos madurar y secar en la planta. En un momento, veremos que las semillas de color negro comienzan a asomar, ese será el momento para cosecharlas y llevarlas al interior para que terminen de secarse. La mayoría de las semillas caerán cuando las agitemos, para las más resistentes, podemos frotar la cabeza de semillas secas entre nuestras manos.
Extraer semillas de Zapallos y Calabazas
También son polinizadas de forma cruzada por las abejas y otros insectos, así que para mantener la pureza debemos aislar las variedades por al menos 400 metros.
Para las calabazas de verano, debemos dejar algunos frutos sin cosechar (aquellos que hemos elegido para obtener semillas). La idea es dejarlos madurar de más, hasta que la corteza se torna amarillenta y ligeramente más dura.
Para los zapallitos y calabazas de invierno, cosecharemos los frutos maduros y los almacenamos durante al menos un mes para darle tiempo a las semillas y que terminen de madurar completamente antes de recogerlas. Para retirar las semillas, cortamos el fruto a la mitad y raspamos con una chuchara, separamos las semillas de la pulpa tanto como sea posible y las dejamos secar bien sobre unas servilletas de papel o trapo durante al menos 2 o 3 semanas.
Recoger las semillas de los Rabanitos
Los rabanitos se polinizan de manera cruzada por medio de los insectos, por lo cual deberemos aislar las variedades por al menos 800 metros.
Debo destacar que no habrá polinización si tenemos una sola planta, necesitamos tener varias plantas en flor para que produzcan semillas.
Dejaremos secar las vainas de semillas en la planta hasta que estén amarronadas y secas.
Finalmente, abrimos las vainas y sacudimos para retirar las semillas.
Obtener las semillas de los Pimientos y Ajíes
La mayoría de las veces los pimientos se autopolinizan, aunque ocasionalmente puede producirse una polinización cruzada a través de los insectos, así que las variedades deberían aislarse por al menos 150 metros.
Para recoger semillas de pimientos y ajíes debemos dejar madurar completamente el fruto en la planta, luego, lo cortamos y raspamos con una cuchara para retirar las semillas, dejándolas sobre servilletas de papel o filtros de café para que se sequen.
Si estamos trabajando con ajíes picantes, es importante tener la precaución de utilizar guantes al manipularlos.
Las semillas deben quedar de color marrón, beige o amarillo, pero nunca blancas, si están de un color blanco brillante, es porque aún no están lo listas.
Es importante que dejes secar las semillas en el interior durante al menos 2 semanas antes de empaquetarlas y guardarlas.
OBTENER SEMILLAS DE TOMATES
Normalmente los tomates se autopolinizan, por lo cual casi siempre podemos obtener semillas de las tomateras, eventualmente podrían intervenir los insectos, así que, para una mayor seguridad a la hora de preservar las variedades, deberíamos separarlas por al menos unos 250 metros.
Mientras mejor sea el fruto que elijamos para recoger las semillas, mejores serán las futuras plantas producidas.
Dejamos madurar entonces el fruto elegido, lo cortamos a la mitad y retiramos con una cuchara la pulpa que contiene las semillas.
El tema con los tomates es que las semillas están inmersas en esta sustancia un tanto gelatinosa que, si la dejamos, impediría que las semillas germinasen, así que lo que haremos será colocar la pulpa con semillas que hemos conseguido dentro de un frasco de vidrio etiquetado, lo cerramos y lo dejamos fermentar por dos días en un lugar fresco y oscuro.
Pasado este tiempo, ponemos todo sobre un colador o tamizador fino y las iremos limpiando bajo el chorro de agua de la canilla, las vamos removiendo y frotando de modo que podamos limpiarlas y que no nos queden restos de esta “membrana” o de pulpa.
Luego, las colocamos idealmente sobre un trapo, para que no se peguen, aunque también puedes usar servilletas de papel y las dejamos secar en interior, al lado de una ventana de modo que le dé el sol, el proceso de secado puede tomar entre 4 o 6 días, pero es importante que las vayamos moviendo y dando vuelta para que se sequen por todos lados. Una vez que están completamente secas, ya podemos almacenarlas.
Estas serían las formas usuales de recoger semillas de los frutos de la huerta, he descrito las más usuales, pero, al mismo tiempo, pueden darte una pauta de cómo proceder con otros frutos, según la característica del “contenedor de semillas”, es decir, en las que se obtienen de frutos, podrías proceder de forma similar a las calabazas o los tomates, en las de vainas, usarías las técnicas de los guisantes o rabanitos, y en las que producen las semillas en la flor, podrías usar la técnica de la albahaca o la lechuga.
Aquí te dejo más información relacionada, para que aprendas Cómo almacenar las semillas correctamente, también te puede interesar como armar CINTAS DE SEMILLAS para facilitar la siembra y por supuesto, siempre es útil tener a mano el Calendario de siembra de la huerta para que hagas tus semilleros en la época correcta.
espero que te haya gustado la nota y te haya resultado útil, si fue así, no dejes de compartirla 🙂
