Cómo sembrar, cuidar y utilizar la Stevia
Seguramente ya conoces o al menos has oído hablar de la Stevia, es una planta que se utiliza mucho como reemplazo del azúcar refinada, es mucho más sana y tiene cero calorías, por lo cual, se ha convertido en una gran alternativa incluso para diabéticos.
Pero mi nota de hoy no se trata de contarte todas las propiedades que tiene la Stevia, se trata de contarte cómo cultivar stevia, desde el proceso de sembrarla, pasando por el trasplante, sus cuidados y por supuesto, la cosecha y utilización básica. Es una buena forma de tener un endulzante en nuestro jardín, ¡las cañas de azúcar no son muy factibles a pequeña escala!
La “stevia rebaudiana” es una planta perenne originaria de zonas semi-húmedas de Paraguay y Brasil. De forma silvestre, estas plantas crecen en suelos más bien ácidos y que permanecen húmedos (no encharcados), lo hacen generalmente cerca de pantanos o arroyos, donde el suelo se presenta arenoso y con una alta humedad.
Así que como podrás ver, no son condiciones imposibles de imitar, solo deberemos tener cuidado con el exceso de agua para evitar podredumbre y enfermedades. Cultivar stevia puede resultar exitoso en la mayoría de los climas, siempre y cuando la protejamos de las heladas y le demos un buen abono orgánico y un riego frecuente que nos asegure la humedad del sustrato.
Cultivar Stevia a partir de semillas
Es cierto que tal vez no te sea tan fácil conseguir semillas de stevia, aunque a través de Internet, ¡nada es imposible! Debes asegurarte de adquirir “Stevia rebaudiana” (Stevia es el género mientras que rabaudiana es la especie), aclaro esto porque ésta es la única variedad que es dulce.
Si compras directamente los plantines, puedes saltearte este apartado y continuar leyendo más abajo.
Las semillas de stevia son fáciles de germinar, siempre y cuando lo hagamos en interior y bajo la luz. Aunque crecen lentamente, en unas 7 u 8 semanas ya estarán listas para el trasplante. Ten en cuenta que solo las semillas oscuras (negras o marrón oscuro) serán viables para la germinación, un color muy claro sugiere que es una semilla vacía y por tanto, será una pérdida de tiempo y espacio.
Bueno, pasemos al hecho, para cultivar stevia, las semillas deberán iniciarse una 8 a 10 semanas antes de las últimas heladas. De momento, usaremos la tierra comercial para macetas y colocaremos de 1-3 semillas en cada semillero, finalmente las cubrimos con una fina capa de sustrato o podemos optar por usar vermiculita. Rociamos suavemente con agua para que el sustrato se “aplaste”.
Para terminar, cubrimos con film o algún plástico transparente y le vamos a dar una iluminación fluorescente, procurando una temperatura de alrededor de 23 a 26 ºC. Algunos libros sobre como cultivar stevia recomiendan, el primer día, dejar la luz encendida las 24 hs. Y ya a partir del segundo, mantener un mínimo de 15 hs. Durante las próximas 3 semanas.
Al cabo de 10 días aproximadamente, las plántulas comenzarán a asomar. Es momento de retirar el nylon y esperar a que tengan al menos un par de hojas verdaderas. Para ese entonces, dejaremos solo una plántula por celda (semillero) para mejorar las posibilidades de supervivencia.
Es preferible regar cada 3-5 días pero desde abajo, para asegurarnos de que el suelo permanezca húmedo. También puede ser benéfico el agregado de algún fertilizante natural añadido al agua y aplicado a medida que las plantitas de stevia van creciendo.
Cuándo y Cómo trasplantar las plántulas de Stevia
Cuando nuestro pequeño cultivo de stevia haya alcanzado al menos unos 10 cm de alto, es momento de realizar el trasplante a un recipiente más grande, es muy útil para favorecer la ramificación, cortar unos 2 cm en los extremos, recuerda que incluso estas pequeñas hojitas pueden ser ya utilizadas para endulzar.
A medida que vayan creciendo podemos ir pasándolas a contenedores un poco más amplios. Cultivar stevia requiere de un suelo arenoso, con un pH de neutro a ácido y que por sobre todas las cosas, no se encharque pero mantenga una constante humedad. Es importante destacar que la stevia no soporta suelos salinos. Igualmente, son muy adaptables y crecerá bien es un sustrato igual al que usas para cultivar buenas hortalizas.
En alrededor de 8 a 10 semanas después de la siembra, y una vez que los peligros de heladas hayan pasado, podremos comenzar a aclimatarlas al exterior, en un inicio las colocaremos en lugares donde estén protegidas de los vientos y donde reciban unas pocas horas de sol. Una vez que ya estén fortalecidas, podremos moverlas a su zona definitiva que será a pleno sol.
Cuidando nuestra propia planta de Stevia
El crecimiento de la Stevia es un poco lento al principio, pero se acelera a medida que avanza el verano.
Uno de los cuidados para cultivar stevia, es colocar un acolchado orgánico en el suelo cuando comiencen los calores más fuertes, esto alimentará las raíces y al mismo tiempo, mantendrá la humedad del sustrato.
Podemos regar una o dos veces a la semana, salvo que la lluvia lo haga por nosotras. Si tienes la posibilidad de usar un sistema de riego por goteo, es el método ideal para estas plantas.
La aplicación de abonos por lo general no es necesario, pero si queremos, podemos aplicar algún fertilizante orgánico bajo en nitrógeno, ya que el exceso de nitrógeno reduce la dulzura de las hojas. Puedes aplicar por ejemplo, un fertilizante foliar 10/10/12 directamente sobre las hojas a los 30 y 60 días después del trasplante al exterior.
Otra consideración a la hora de cultivar stevia: los tallos de la stevia pueden ser propensos a romperse si hay mucho viento, por eso es recomendable “pellizcar” los brotes cada 3 a 4 semanas para fomentar la ramificación hacia los costados. Otra estrategia puede ser el uso de un tutor o enrejado.
Si hablamos de plagas y enfermedades, pueden ser atacadas por dos hongos en particular: “Septoria steviae y Sclerotinia sclerotiorum”. Este último, por ejemplo, produce lesiones oscuras en los tallos, cerca del suelo que se suceden por marchitamiento y eventual colapso de la planta. Los hongos son el principal problema debido a las condiciones de humedad constante del suelo.
Los insectos, por su parte, rara vez se alimentan de esta planta, por lo que no sugieren un problema.
Cosecha y Uso de la Stevia
Las hojas podrán ser cosechadas y utilizadas en cualquier momento, así tan frescas como las cortamos de la planta, pero si quieres guardar o secar tu cosecha, el momento ideal es cuando comienzan a dar señales de florecimiento, por lo general, a finales del verano. Si quieres conservar tu planta de stevia más allá del próximo invierno, deja por lo menos unos 15 cm. intactos para permitir que vuelva a brotar.
Para disecarlas, utiliza tu método usual para el secado de hierbas, por ejemplo, colgadas al sol; en solo 12 horas tendrás tu cosecha totalmente seca. Las hojas de Stevia durarán varios años en un frasco de vidrio con cierre hermético. Una cosa más, por lo general, los tallos se descartan, ya que el dulce intenso está presente solo en las hojas.
En cuanto a cómo utilizarla, más arriba te he dejado una página en la que puedes encontrar mucha información sobre esta planta y buenas recetas, de todos modos, en resumen, te cuento que puedes usarla fresca, para endulzar y saborizar una taza de té de hierbas (necesitarás solo ½ hoja) y sabe muy bien.
También puedes moler las hojas secas en un mortero y utilizarla como haces con el azúcar refinada, solo que recuerda que esta maravillosa planta es 30 veces más dulce que el azúcar común. Como regla general, 1 cucharada grande de stevia en polvo es el equivalente a una taza de azúcar.
No olvides dejar tus comentarios acerca de esta maravilla de la naturaleza y porqué no, compartir la nota en tus redes sociales, nunca se sabe a quién podría servirle, Cuéntame ¿ya te has decidido a cultivar stevia en tu jardín?
