Los Hemerocallis, Lirio de día o Lirio de San Juan
Hemerocallis es el género de estas bellas plantas rizomatosas, herbáceas y perennes, que también son llamadas lirio de San Juan, daylily, azucena amarilla o turca o el más común: Lirio de Día o Lirio de la Mañana, se llama así ya que tiene la particularidad de que sus flores abren al amanecer y mueren al atardecer, durando solo un día. Lo bueno, es que las flores se suceden unas tras otras a lo largo de casi un mes y día tras día. Existen al menos 15 especies distintas de Hemerocallis, incluso en algunas, las flores nacen al atardecer y mueren al anochecer.
Descripción: Los Hemerocallis son plantas herbáceas y perennes, con raíces rizomatosas y cuya altura puede variar desde los 20 cm. a 1.20 m. Sus hojas son largas y estrechas, de un hermoso verde y carinuladas. Es una planta hermafrodita y su fruto es una cápsula trivalva con ángulos redondeados, a veces los frutos no aparecen debido a que la planta puede ser estéril. Las semillas son negras y brillantes. Una vez concluida la floración, se deben cortar los escapos (varas) a ras del suelo, con mucho cuidado de no dañar la corona. Los Lirios de la mañana son muy resistentes al frío aunque sensibles a las heladas cuando apenas están emergiendo.
Flores: Las flores del Lirio de día o Hemerocallis son en forma de trompeta, grandes y muy vistosas, morfológicamente parecidas a los lirios y según la especie y variedad, las encontraremos en infinidad de colores y matizados, siendo el más común el color naranja. También son aromáticas, con perfume a azahar, y duran apenas un día, pero en verano, aparecen unas tras otras durante varias semanas. Es conveniente ir quitando las flores marchitas para así prolongar la floración.
Floración: El lirio de San Juan florece, según las especies, desde finales de la primavera hasta principios de otoño, durante todo un mes. Algunas variedades incluso lo hacen dos veces. Si plantas diferentes variedades, se pueden obtener contantes flores desde la primavera hasta el otoño.
Dificultades en el cultivo: Se deben evitar los terrenos demasiado áridos o excesivamente expuestos.
Tipo de suelo: Le basta un suelo normal de jardín que drene bien.
Exposición a la luz: Los hemerocallis prefieren estar a media sombra.
Riego: Precisan de un riego regular cada 2 días, procurando que el terreno esté siempre húmedo.
Abonos: Es recomendable aplicar un abono orgánico antes de plantar y un abono mineral durante el período de floración.
Plantación: En primavera u otoño. Es importante saber que no deben plantarse a mucha profundidad, la corona (que es la parte que une el follaje con las raíces) no debe estar a más de 3 cm. de la superficie.
Multiplicación y reproducción: La multiplicación por semilla en general solo se utiliza para generar nuevas especies y para germinar, requieren estratificación húmeda-fría por unas 6 semanas. Lo más común es multiplicarlos dividiendo las macollas después del período de reposo, o sea, en primavera en el hemisferio norte y en otoño en el hemisferio sur. Hay que realizar esta división cuando la temperatura sea agradable, es decir, antes del calor intenso o de la primera helada otoñal, según la zona. Las matas de hemerocallis se dividen separando las zonas enraizadas con al menos 3 brotes. Esta tarea, además de darnos nuevas plantas, aumentará la fuerza de floración de las mismas.
Utilización: Pueden utilizarse para crear grupos aislados y en borduras. También se utilizan como flor cortada.
Plagas y Enfermedades: Caracoles y babosas. Collectotricum , Aureobasydium y Colleocephacus.
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