Crocus de primavera o croco
El crocus de primavera o crocus vernus es una de las más de 80 especies perteneciente a los crocus, dentro de los cuales también encontramos al Crocus sativus de cuyos estigmas se obtiene el azafrán de cocina.
El crocus es una planta bulbosa que posee cormos como órganos subterráneos de reserva. Pertenece a la familia de las iridaceae y es originario del área mediterránea.
Esta especie en particular se planta en otoño para que florezca en primavera, es de fácil mantenimiento y prefiere el pleno sol a semisombra.
Entre las numerosas especies encontramos crocus de floración invernal, primaveral u otoñal. Los crocus vegetan durante la estación en que el suelo ya suele estar húmedo, por lo que no conviene regarlos en este período.
Descripción: Las hojas son muy finas y acanaladas y logra una altura de 10-25 cm.
Flores: las flores del croco son en forma de cáliz con estrías de tonalidades muy intensas. Las encontramos en colores tan variados como el blanco, amarillo, rosado o malva y violáceos.
Dificultades en el cultivo: el crocus no necesite cuidados particulares. Los bulbos pueden dejarse en la tierra; conviene cortar las hojas solamente cuando ya han amarilleado del todo, para que el bulbo se nutra correctamente, si no lo hacemos, o sea, si cortamos las hojas antes de tiempo, perderemos la floración del año siguiente
Floración: primavera.
Tipo de suelo: no tiene grandes requerimientos, la tierra de jardín le basta y prefiere si es un poco arenosa.
Exposición a la luz: pleno sol semisombra.
Plantación: los crocus deben plantarse en otoño para que florezcan en primavera.
Multiplicación: la reproducción de los crocus se realiza espontáneamente o bien separando de manera manual los cormos pequeños que se forman en torno al cormo principal.
Siembra: si bien pueden sembrarse partir de semillas no florecerán al menos durante trea o cuatro años.
Utilización: en los jardines de estilo natural se procede diseminar los bulbos esparciéndolos en medio del césped ya que quedan muy lindos y se obtiene también un notable efecto decorativo envolturas y rocallas. También van muy bien en macetas.
Riego: los crocus necesitan riegos moderados y escasos a inexistentes durante el período de reposo.
Cultivo en interiores: si bien pueden cultivarse en interiores deberás proveerle al menos cuatro horas de sol diarias y temperaturas frescas durante la noche.
Abono: puedes abonar sobre todo en la época de floración con algún fertilizante orgánico.
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