En nuestro paso por la jardinería tarde o temprano nos encontraremos con la necesidad de utilizar abonos o fertilizantes; y digo «o» porque aunque son muy similares tienen una composición diferente y de eso hablaremos brevemente a continuación.
Pero primero entendamos el concepto sobre cuál es la función de estos productos:
Tanto los abonos como los fertilizantes son los encargados de devolver al suelo los micronutriente y macronutrientes que las plantas necesitan para sobrevivir de forma saludable.
Debido a que las plantas agotan estos minerales, sobre todo cuando están en macetas, el uso de los abonos y fertilizantes se vuelve imprescindible.
La diferencia entre abonos y fertilizantes
La característica que permite que diferenciamos entre un abono y un fertilizante es básicamente su composición, los abonos son de origen natural, ya sea animal o vegetal y aunque podamos comprarlos ya manufacturados la materia prima del abono es orgánica. En el caso de los fertilizantes, la materia prima utilizada es artificial.
También se diferencian en que los abonos usualmente pueden aplicarse directamente sobre la tierra incluso cerca de las raíces en algunos casos sin que esto provoque ningún tipo de problema y además efectuando su función de una manera óptima sin necesidad de materiales adicionales, sin embargo, los fertilizantes precisan de un tercer elemento para funcionar, generalmente, agua; es decir, un fertilizante debe entrar en contacto con el agua para que efectivamente pueden liberar los macro o micronutrientes necesarios.
| Abonos | Fertilizantes |
|---|---|
| Origen natural (animal o vegetal o mineral) | Origen Artificial (sintético u orgánico) |
| Liberan los nutrientes por sí mismo | Necesita agua para liberar nutrientes |
| Enmienda y enriquece el suelo (Estructura, drenaje, entre otros) | Pueden modificar el suelo (Nivel de pH, salinidad, entre otras) |
Tipos de Abonos Orgánicos
Los abonos orgánicos proceden principalmente de residuos naturales vegetales o animales. Se utilizan como abono de fondo y liberan gradualmente nutrientes como nitrógeno, potasio y fósforo, así como oligoelementos esenciales para la salud de las plantas. Como la asimilación es más lenta, no hay riesgo de lixiviación.
Mientras que los fertilizantes minerales están disponibles directamente, los abonos orgánicos no: primero tienen que ser convertidos en iones minerales por las bacterias del suelo. Por lo tanto, actúan más lentamente que los abonos minerales y son más un abono de fondo que un abono de mantenimiento.
Los abonos orgánicos pueden ser líquidos o solidos y los más utilizados son:
- Compost
- Estiercol
- Guanos
- Sangre seca
- Humus de Lombriz
- Bokashi
- Urea
- Abonos verdes
❗ Lectura recomendada: Abonos orgánicos comerciales Líquidos y Solidos
Abonos caseros para las plantas
Muchos de los abonos orgánicos tanto para la enmienda del suelo como para el agregado de nutrientes pueden ser fabricados en casa.
Tambien pueden distinguirse entre solidos y líquidos. A continuación, una lista de los más eficaces, haz clic en ellos para aprender más sobre sus cualidades y ver la receta de como prepararlos:
- Purín de gallinaza
- Té de compost
Tipos de Fertilizantes Minerales y Químicos
Un abono mineral es una sustancia de origen mineral natural como las rocas sedimentarias, salinas o eruptivas de los yacimientos (fosfato, potasa, etc.) u obtenida por transformación y síntesis industrial y química.
Un abono mineral puede ser natural y/o químico.
Un abono mineral puede ser :
- Simple: significa que sólo proporciona un elemento. Se dice entonces que los fertilizantes son «nitrogenados», «potásicos» o «fosfatados», según el elemento del que estén hechos.
- Compuesto: significa que combina los distintos elementos (nitrógeno, fósforo, potasio) en un solo producto. Generalmente se trata de abonos sintéticos.
A su vez, los compuestos se pueden dividir en:
- Binarios: compuestos por dos elementos, identificados como NP, PK o NK;
- Ternarios: compuestos de tres elementos, etiquetados NPK.
- Otros abonos pueden contener elementos adicionales, como magnesio y hierro.
Las letras de los enunciados en los abonos y fertilizantes se refieren a las fórmulas químicas de los elementos.
N significa nitrógeno, P significa fósforo y K significa potasio. Mg significa Magnesio y Fe significa Hierro.
Los fertilizantes pueden ser líquidos o solidos
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