Cultivar quinua o quinoa de forma casera
La quinua o quinoa es una alimento muy popular sobre todo entre quienes llevan una alimentación vegana o vegetariana. Si bien no se encuentra en la familia de los granos más tradicionales, como el trigo, la avena o la cebada, si es considerada un grano, y uno extremadamente nutritivo, algunos incluso la catalogan como el alimento del fututo.
El nombre científico de esta fantástica planta es “Chenopodium quinoa”, y recibe muchos otros nombres a lo largo del mundo además de quinua; Trigo inca, Dahua, Canigua, Arroz del Perú, Hupa, Triguillo, Cañagua, Candonga, Licsa, Canahua.
Es originaria de las zonas del altiplano de América del Sur y se la puede encontrar de manera espontánea, principalmente en Bolivia.
La quinua es una planta anual, de hojas anchas y de gran porte, puede llegar a medir entre 2 y 2.5 m cada planta, y a diferencia de otras plantas de grano, tiene la particularidad de florecer antes de formar la semilla, sus flores son de color rojo o púrpura y se agrupan formando una especie de espiga en el extremo del tallo.
Prefiere un clima relativamente fresco, aunque no soportará las heladas, no puede crecer en áreas donde las temperaturas se mantienen habitualmente por arriba de los 35ºC o por debajo de los -1ºC. Esta es una consideración muy importante a tener en cuenta si estás pensando en cultivar quinua en casa.
Cultivar quinua desde semilla
Puedes iniciar la quinua en semilleros en interior para su posterior trasplante, pero lo más seguro, común y exitoso, es hacerlo directamente en tierra, apenas iniciada la primavera, cuando la tierra ya se ha calentado un poco y cuando la última helada ya ha pasado.
La quinua germina con mayor seguridad cuando las temperaturas nocturnas se mantienen al menos en unos 15 o 16 ºC.
Para cultivar quinua o quinoa de forma óptima, utilizaremos suelos fértiles, semi-profundos y con muy buen drenaje, aunque también puede crecer en suelos más adversos, arenosos, infértiles, arcillosos e incluso, moderadamente marinos, en este caso, se obtendrán cosechas mucho más pequeñas (menor rendimiento).
Gusta de un pH ligeramente ácido (entre 6 y 6.5).
Deberemos elegir una zona del terreno que reciba pleno sol, aunque podría soportar una media sombra, con la consiguiente disminución de la cosecha.
Una vez elegida la zona para la siembra, necesitaremos carpir la tierra al menos unos 60 cm para garantizar un buen drenaje y además, debemos eliminar la mayor cantidad de malezas posibles, ya que la quinua tendrá problemas para competir con las mismas, porque su crecimiento no es tan rápido.
Colocaremos las semillas a no más de 1.2 cm de profundidad y con una separación entre plantas de al menos 70 cm. Cubrimos con tierra. En 3 o 4 días deberíamos comenzar a ver los brotes.
Debemos regarlas solo si no hay lluvias naturales, ya que durante la primavera, suelen ser suficientes. La quinua soporta la sequía, salvo en la época de floración. De todas maneras, una correcta humedad mejorará la calidad del cultivo, tanto la cantidad de semillas como del follaje.
Datos importantes para cultivar quinua
- Época de siembra: primavera
- Días hasta la germinación: 4 a 5 días
- Raleo: manual cuando la planta alcanza 15 cm.
- Días hasta la cosecha: 90 a 120 días
- Necesidades de luz: pleno sol
- Requerimientos de agua: agua de vez en cuando durante los períodos de sequía
- Suelo: Bien drenado y fértil
- Contenedor: No es adecuado para el cultivo de contenedores
Cuidados de las plantas de quinua
Una de las principales preocupaciones que debemos tener al cultivar quinua, son las malas hierbas, ya que competirán duramente con nuestro cultivo y por lo general, la quinua termina perdiendo, al menos, hasta estar bien establecida.
Las plantas de quinua crecen lentamente en un principio, una vez que alcanzan unos 30 cm, crecerán mucho más rápido y se volverán más autosuficientes.
Como dije antes, no deberemos preocuparnos demasiado por los riegos, salvo que estemos en una zona o época de sequía.
Quinua en Maceta
Las plantas de quinoa o quinua son demasiado grandes para ser cultivadas en macetas, como mencioné anteriormente cada semilla se convertirá en una mata de hasta 2.5 m de alto.
Además, no tiene sentido cultivar solo 1 o 2 plantas, ya que la cosecha sería mínima, para tener una idea más precisa, con unas 10 u 11 plantas podremos cosechar aproximadamente medio kilo de granos de quinua.
Plagas y Enfermedades
Las semillas de quinua están recubiertas de una sustancia llamada “saponina” que es bastante amarga y por lo general, evita que pájaros y otras plagas se metan con los granos.
Sin embargo, las hojas, si pueden ser vulnerables a los daños de algunos insectos como pulgones o escarabajos pulga. Una vez que la planta está lo suficientemente madura, puede soportar el daño de estos pequeños insectos sin problemas, pero mientras son jóvenes, puede suponer un problema.
Algunas orugas y minadores también pueden ser atraídos, aunque en menor escala, por lo general, bastará con ir eliminándolos a medida que los vemos. Las plagas no son un gran problema a la hora de cultivar quinua.
Cosecha y Almacenamiento
Los granos de quinua pueden utilizarse como muchos otros granos, normalmente cocidos. Puede usarse como reemplazo del arroz y similares y existen muchas recetas en internet que utilizan semillas de quinua. Ya mencionamos la gran cantidad de propiedades que tienen estos granos, pero si quieres saber más, puede visitar la página “beneficios de quinua” donde hacen un detalle exhaustivo de todas estas propiedades que puedes incorporar a tu alimentación.
Te darás cuenta al cultivar quinua que la cosecha está lista con dos señales, por una lado, el follaje comienza a caerse y por el otro lado, debes comprobar que la semilla esté seca. Para ello, toma un grano e intenta clavarle la uña, si se hunde, todavía le falta madurar, por el contrario, si es muy difícil marcarla, significará que tus granos de quinua están listos para ser cosechados.
Las semillas deberían caer de las espigas sin ningún problema sencillamente aventándolas y poco. Debemos ir “tamizándolas” para eliminar cualquier resto de hojas, cascaras o suciedad que pudiesen tener.
Finalmente, deberemos lavarlas abundantemente para quitarle la saponina; esa sustancia que aleja a las plagas, tampoco es muy agradable para nosotros, así que debemos lavar y lavar hasta que no haya ningún resto espumoso en el agua, la saponina es jabonosa así que mientras haya espuma, hay que continuar enjuagando.
Después del lavado, deberemos dejarlas secar completamente antes de proceder a su almacenamiento.
Para guardar tu cosecha, utiliza un recipiente con cierre hermético y guárdala en un lugar fresco y oscuro. Debería durar mínimamente seis meses.
Cultivar quinua no es tan difícil como podríamos imaginar, solo necesitamos de un buen terreno (amplio) y el clima correcto y podremos disfrutar de semillas de quinua, orgánicas y cultivadas con la seguridad de nuestros cuidados.