El Jardín de hierbas aromáticas
No todos los amantes de la naturaleza y la jardinería y el tiempo suficiente o se sienten debidamente preparados, para tener y mantener una huerta en casa, y si bien es una pena, es perfectamente entendible. Si estas en este grupo, podrías considerar al menos crear tu propio jardín de hierbas aromáticas.
Las hierbas aromáticas y medicinales, aportarán muchos beneficios no sólo tu jardín, sino a tu vida. Ayudan a controlar las plagas, agregan agradables aromas tanto si las cultivar en exterior como interior, están disponibles para aromatizar tus comidas ya sea que las utilices frescas o secas y de paso, ahorras dinero.
Crear tu Jardín de hierbas aromáticas
Lo primero que necesitas para comenzar con tu jardín de hierbas aromáticas, es elegir que hierbas vas a plantar. La realidad es que hay muchas disponibles, así que tal vez te cueste decirte. La mejor forma de hacerlo es ir hasta tu alacena y mirar qué es lo que tienes y recordar cuáles son las que utilizas más a menudo. Entre ellas seguramente encontrarás Romero, salvia, albahaca, eneldo, menta y perejil entre otros y la buena noticia es que son fáciles de cultivar.
El otro punto importante a considerar, es la zona que estará destinada a tu jardín de aromáticas. Aquí, el tema fundamental es el drenaje del sustrato y las horas de sol que recibe por día.
No importa si decides crear un jardín de hierbas aromáticas en macetas al lado de la ventana, en las borduras de tus camas de flores o en 1 m² en un sector tu jardín, lo primordial es que reciba al menos seis horas de sol (preferiblemente durante la mañana) y que el suelo provea un excelente drenaje, como situación ideal adicional, les vendría bien un área donde estén protegidas del viento.
Si vas a cultivar tu jardín de hierbas aromáticas en contenedores, recuerda que deberán tener agujeros de drenaje y lo ideal es colocar fondo de la maceta una capa de rocas o macetas rotas. Si vas a cultivarlas directamente tierra, es recomendable cavar unos 30 cm de profundidad, colocar una capa de rocas trituradas al fondo y luego ya si, colocar un buen sustrato. Este pequeño trabajo permitirá que el agua drene bien de modo que el terreno no se encharcar y termine pudriendo tus aromáticas.
Una vez preparado el terreno, es el momento de plantar. Puedes elegir comprar directamente los plantines en tu vivero o tienda local o animarte a adquirir sobre las semillas (gastaras mucho menos dinero) y sembrarlas.
Las aromáticas germinan y crecen muy rápidamente, por lo que iniciarla a partir de semillas no es una mala idea, deberás únicamente mantener el suelo húmedo para que las semillas germinen y crezcan correctamente.
Considera que algunas hierbas aromáticas son muy invasiva, como por ejemplo la menta, si la siembras directamente en tierra lo más seguro es que vas a tu jardín en cuestión de días. Este tipo de hierbas aromáticas más agresivas es recomendable que las cultives en contenedores.
Revisa nuestro calendario siembra de hortalizas y aromáticas, para encontrar datos como la profundidad de siembra de las semillas, así como su tiempo de germinación de aclarado, el tamaño de contenedor recomendado y verduras en macetas y el espacio ideal entre plantas.
Cuidados del jardín de aromáticas
Por 
suerte, cuidar nuestro jardín de hierbas aromáticas no demandará grandes esfuerzos. Por lo general, las aromáticas requieren de poco cuidados, tienen una capacidad de adaptación muy alta y son resistentes incluso a zonas soleadas y secas, a excepción del perejil, la menta, la valeriana, la hierbabuena y la hierbaluisa, que requieren un mayor cuidado en los riegos.
La gran mayoría de las hierbas aromáticas son perennes, con lo cual podrás disfrutarlas durante muchos años y se hacen cada vez más fuerte a medida que más se establece. En esta categoría encontramos aromáticas como romero, orégano, tomillo, salvia, estragón o ciboulette.
Pero también hay otras que son anuales, como la albahaca, o bianuales, como el perejil, en estos casos, considera que deberás resembrarlos cada año.
Entre las tareas de mantenimiento que puede conllevar un jardín de hierbas aromáticas, es la poda (sobre todo de las especies arbustivas) que generalmente se realiza después de la floración, la protección durante el invierno colocando algún mulching de paja por ejemplo.
También debemos controlar a menudo el buen drenaje del suelo y también es recomendable agregar 1 o 2 veces al año, una capa de compost a la tierra, sobre todo si estas cultivando tus aromáticas en contenedores.
Recolectando tus hierbas aromáticas
Recolectar y cortar las hojas de tus aromáticas cuando las plantas aún no se han establecido, puede ser fatal. Según de qué hierba se trate, deberás esperar algunos meses antes de comenzar a recolectar, aunque nos cueste cultivar la paciencia, esta espera nos permitirá tener un jardín de hierbas aromáticas saludable durante los próximos años.
En nuestro calendario de siembra, podrás encontrar el tiempo que debería transcurrir desde la siembra hasta que podemos realizar la recolección.
Puedes cosechar tu jardín de hierbas aromáticas para utilizarlas frescas y también puedes someterlas a un proceso de secado para tenerlas siempre disponibles durante todo el año, en cualquier caso, recuerda siempre estar las hojas marchitas y las islas correctamente.
Esta tarea de secado puede realizarse de varias maneras, una de ellas es colocando tu cosecha sobre una bandeja de horno y hornearlas, con la puerta del horno abierta, a una temperatura muy suave (unos 76 °C o 170ºF) durante entre 2 a 4 horas, ve girándolas cada tanto. Pasado este tiempo, estarán lo suficientemente secas para almacenar.
En cuanto a la tarea de almacenar hierbas aromáticas, lo ideal es hacerlo en recipientes de plástico o de vidrio, ya que el papel o el cartón podrían absorber sabor de las mismas. Es importante que durante los primeros días de almacenamiento, compruebes que no haya rastros de humedad, si esto sucediera deberás volver a repetir el proceso de secado, ya que la humedad produce moho y definitivamente no es lo que queremos.
Si disfrutas tanto de la jardinería como de agregar aromas y sabores a tus comidas, no dudes en iniciar tu propio jardín de hierbas aromáticas, ¡no vas arrepentirte!