El bambú de la suerte se ha extendido por todo el mundo desde principios de la década de 2000.
La mayoría de la gente reconocería al instante un bambú de la suerte. Es una planta de interior ampliamente disponible en centros de jardinería, floristerías, tiendas de productos asiáticos e incluso supermercados.
Esencialmente, es una forma feng shui de presentar una dracena bastante inocua (Dracaena sanderiana), que no es un bambú de verdad, a la que se le han quitado el 90% de las hojas y se ha cultivado en un jarrón o una pequeña bandeja llena de piedras y agua. Los bambúes de la suerte se producen en masa en varios países asiáticos (China, Taiwán, Tailandia, etc.), donde se cree que traen buena suerte.
A menudo ves bambúes de la suerte con un tallo en espiral. ¿Te has preguntado alguna vez cómo se crean?
Sin embargo, muy a menudo esta planta se ofrece con un tallo en espiral o incluso trenzado. ¿Cómo es posible? Esta es la explicación:
El método asiático
Forzar a una drácena a crecer en espiral no se hace podando (al menos no directamente) ni atándola con alambre (como en el caso de un bonsái), sino exponiéndola a la luz unidireccional.
Se sabe que las plantas necesitan luz para crecer y también que crecen en la dirección de la luz (esto se llama fototropismo positivo).
Si se cambia la orientación de la fuente de luz principal, la planta se inclinará hacia esa fuente.
Los viveristas asiáticos inducen el crecimiento en espiral de sus plantas de una forma bastante sencilla: colocando la planta de lado. Con el tallo ahora horizontal, su punta empezará a girar hacia la luz de arriba, produciendo un nuevo crecimiento radicalmente vertical, casi en ángulo recto. Luego, al cabo de unas semanas, los cultivadores giran el tallo un poco en el sentido de las agujas del reloj (o en sentido contrario). A continuación, la planta cambia ligeramente de dirección, tratando siempre de enderezarse. Esta rotación se repite con regularidad, dando poco a poco a la planta un tallo curvado.
Para obtener resultados razonablemente rápidos ( aunque el proceso lleva mucho tiempo, incluso años en el caso de las espirales múltiples), los viveristas garantizan unas condiciones de cultivo ideales: luz solar moderada, temperaturas tropicales, alta humedad, fertilización cuidadosa, etc.
Se trata de un trabajo de precisión y los productores tienen que calcular cuidadosamente los movimientos que hay que hacer, pero se han convertido en maestros en forzar el tallo hasta convertirlo en un tallo helicoidal vendible y están aplicando este proceso a gran escala.
Crear una espiral de bambú de la suerte en casa
El método profesional tiene cierto sentido al aire libre en los trópicos, pero cultivar una planta horizontalmente en tu salón u oficina sería bastante incómodo. En primer lugar, ocupa mucho espacio, pero lo más importante es que tiene muchos inconvenientes: la tierra de la maceta tumbada se derrama, regar correctamente es casi imposible y si enderezas la planta para regarla bien, tienes que ponerla exactamente en la posición correcta. Es mucho más fácil obligar a un bambú de la suerte a crecer en espiral cuando está de pie.
Para ello, existe el siguiente método, recomendado por algunas fuentes de información, entre ellas ProFlowers®.
⚠️ Ten en cuenta que personalmente no recomiendo hacer lo siguiente, no si eres un jardinero holgazán. ¡Es demasiado esfuerzo! Además, tienes que hacerlo correctamente o tu espiral será muy desigual. (Los cultivadores profesionales lo saben todo sobre los tiempos: todo se controla con mucha precisión). Y si lo intentas, tardarás (¡literalmente!) años en conseguir una espiral decente en condiciones domésticas.
Sin embargo, si eres más diligente y paciente que yo…
Materiales
Básicamente, todo lo que necesitas es una planta de bambú de la suerte, una caja de cartón y una ventana soleada.
Lo ideal es empezar con una Dracaena sanderiana cultivada en maceta con todas sus hojas intactas. Será mucho más vigorosa que una dracena tratada como bambú de la suerte.
Ten en cuenta que la planta debe estar bien enraizada en una maceta con tierra para macetas: ¡ni se te ocurra hacer lo siguiente con una planta que crezca en piedras o en agua y cuyo crecimiento ya esté muy restringido!
¿Por qué una ventana soleada cuando es bien sabido que el bambú de la suerte tolera la poca luz? Porque apenas crece con poca luz. Si quieres que se forme un tallo en espiral, debes procurar que crezca al máximo y, por lo tanto, ofrecerle una luz excelente, incluso unas horas de sol diarias si es posible.
Esto es lo que hay que hacer:
Crear una espiral de bambú de la suerte paso a paso
- Retira los paneles laterales de una caja de cartón de una altura aproximadamente igual a la de la planta.
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- Coloca tu planta dentro de la caja.
- Coloca la caja frente a una ventana soleada, de modo que reciba toda la luz a través del lado abierto, pero esté a la sombra en los otros 3 lados y en la parte superior.
- Mantén tu planta como de costumbre (regando, abonando, etc.) hasta que empiece a inclinarse hacia la luz de forma muy evidente.
- Gira ligeramente la planta. Ajustará su ángulo y seguirá creciendo hacia la luz.
- Sigue girando la planta en la misma dirección y el tallo acabará formando una espiral.
- Cuando la espiral se forme a tu gusto, retira la caja y arranca las hojas inferiores, dejando sólo un mechón de follaje en la parte superior, para que la espiral sea claramente visible.
- Haz que tu bambú en espiral sea la estrella de tu casa.
Formar tu propia espiral de bambú de la suerte es todo un proyecto y te llevará 2 ó 3 años completarlo. ¿Puedo sugerir entonces que, si te gustan las plantas con un giro en el tallo, es mejor que no compres una ya preparada?
