Si lo que necesitas es cubrir una pérgola con belleza y perfume, una de las plantas trepadoras favoritas es la glicina (wisteria), una bella especie que desde principios a finales de la primavera se cubrirá de hermosos racimos de flores lavanda, rosadas o blancas.
Cultivar glicinas no es difícil pero debes tener mucho cuidado con ella ya que es extremadamente invasiva y podría trepar por donde no quieres.
La glicina puede crecer 2 m en un año y alcanzar de 10 a 30 m según la especie.
La glicina es una trepadora leñosa originaria de Japón o China según su variedad que puede crecer hasta unos 15 m de altura.
Es de hoja caduca y su mayor atractivo (además de su poder cubritivo) son sus flores, unos racimos que pueden tener hasta 25 cm de longitud y que aparecerán en primavera antes que el follaje. Suelen tiene una segunda floración en otoño de racimos más pequeños y algunas especies pueden florecer dos veces al año: en primavera y en verano. Sus frutos son vainas alargadas, legumbres, aterciopeladas y muy vistosas.
Si vas a comprar una glicina, ten en cuenta que pasarán algunos años desde que la plantes hasta que comience a producir flores. Las flores aparecerán en las ramas que hayan nacido el año anterior. Así que no te desesperes si han pasado dos años desde que plantaste una wisteria y aún no te ha dado flores, si la ves saludable, sólo debes esperar un poco más.
Siembra y plantación de la glicina o wisteria
¿Dónde plantar glicina? Suelo y exposición
El factor más importante a considerar a la hora de cultivar una glicina es la ubicación.
La glicina o wisteria es una vid treparadora que trenza sus ramas, por lo cual requiere un soporte muy resistente (nunca un simple tutor) y una poda regular para mantenerla bajo control.
La glicina se adapta a todos los suelos, excepto a los calcáreos. Prefiere los suelos arenosos y ligeramente ácidos. Puede crecer en suelos secos o pobres, aunque si hablamos de preferencias, lo ideal es un suelo profundo y que retenga algo de humedad, pero que drene bien. Las glicinas plantadas en un suelo demasiado rico forman mucho follaje en detrimento de las flores.
A la glicina le gustan los lugares soleados (sur o suroeste) y resguardados de los vientos del norte (en el caso del H. Sur, la sería nor-noreste con protección de los vientos del sur). Es muy resistente al frío (-15°C). Necesita al menos 6 horas de luz solar al día; ¡su floración depende de ello!
La glicina es una magnífica decoración para muros, vallas, fachadas, pérgolas, barandillas de escaleras, etc. Si se utiliza una planta de tallo, puede utilizarse como planta independiente en un césped.
Presta atención a la calidad del soporte, porque sus tallos tienden a doblar las vallas más fuertes o a aflojar las columnas débiles.
¿Cuándo y cómo plantarla?
Las glicinas se plantan generalmente en primavera u otoño, cuando no hay riesgo de heladas. También se puede plantar en verano, pero evitando el calor excesivo y regando regularmente.
En la época de la plantación:
- Cava un agujero de dos veces el diámetro de la maceta de la planta.
- Prepara una capa de drenaje en el fondo del agujero (arena, por ejemplo) y cúbrela con una mezcla de compost y tierra de jardín.
- Coloca el cepellón en el agujero, con los tallos inclinados hacia su soporte.
- Riego: 2 regaderas en el momento de la plantación y riego regular de mayo a septiembre (noviembre a marzo en el H. Sur).
- Acolcha la superficie con un mulching organico de 5 a 10 cm.
A la hora de plantar, no hay que olvidar guiar la glicina sobre su soporte. La glicina no se aferra a su soporte por sí misma, ya que no tiene garras, pero sus ramas giran alrededor de su soporte de forma natural. La glicina también puede enrejarse durante su crecimiento.
Guiando el crecimiento de la glicina
La glicina es ideal para cubrir de manera muy efectiva una glorieta o pérgola y guiarla a medida que trepa, hará que sea mucho más fácil de controlar.
Ten en cuenta que la forma de trepar de la glicina variará según la especie por ejemplo la wisteria sinensis o china se riega hacia la izquierda, mientras que la wisteria floribunda o glicina japonesa lo hace al revés, enredándose en el sentido de las agujas del reloj.
El primer paso para comenzar a dar forma a esta bella trepadora, es seleccionar el tallo más erguido y adjuntarlo al soporte que hayas elegido. Ahora deberás retirar todos los brotes laterales de modo tal que vaya creciendo hacia arriba.
Las nuevas ramas laterales pueden ir guiándose de tal modo que llenen los espacios de la estructura de soporte, lo ideal, para que logremos un gran poder cubritivo, es espaciar estas ramas laterales a unos 18 cm de distancia.
Una vez que haya alcanzado la altura deseada debemos pellizcar o cortar la punta de la vid principal para atrofiar su crecimiento y que no continúe creciendo en altura.
Cultivo de glicina en maceta
Si no tienes un jardín, puedes cultivar tu glicina en una maceta grande. Recuerda que el tamaño de la maceta también definirá el tamaño y la altura de la planta.
Entre las recomendaciones de sugiere usar contenedores de al menos 50 cm de ancho, alto y profundidad, porque las glicinas necesitan de un suelo profundo para echar buenas raíces, Si la vamos a cultivar tipo árbol, puede ser una maceta mas pequeña pero su queremos que trepe bastante, mejor optar por al menos 70 cm.
Una glicina en maceta no será tan fuerte y resistente como en el suelo, pero florecerá igual si está bien cuidada y alimentada con un abono rico en potasio colocado al pie de la planta en febrero (agosto en el H. sur).
La época para la plantación es en otoño o primavera. Recuerda que cuando se trasplanta le puede tomar al menos dos años en volver a florecer.
Otra recomendación importante para las glicinas en maceta es el riego, en verano, sobre todo, pueden agobiarse de sed, es por eso que es una idea inteligente planear de antemano un sistema de riego por goteo de modo tal que nunca sufra de un suelo reseco.
Ideas de asociación
Laburnum anagyroides
La combinación con la llamada glicina amarilla o Lluvia de oro es un clásico espectacular.
Iris
Siempre hay lirios de jardín que florecen al mismo tiempo que las glicinas.
Euphorbia
El verde ácido de la euforbia characias contrasta con el suave malva de la glicina.
Ceanothus
Contra una pared, la glicina se encarga de la floración de un Ceanothus de primavera.
Cultivo y mantenimiento de glicina
La glicina es fácil de cultivar ya que requiere poco mantenimiento:
- Se debe regar con regularidad durante el verano, especialmente cuando hace calor: cada 5 días en caso de sequía para las plantas en el suelo y todos los días para las plantas en macetas.
- No abones ni enmiendes en exceso tu suelo si quieres obtener una bonita floración, ya que esto favorece el desarrollo del follaje en detrimento de las flores.
- Si tienes tiempo, retira las flores marchitas sobre la marcha, ya que sus semillas son tóxicas (venenosas si se consumen).
Poda de la glicina
A pesar de ser guiadas y controladas, las glicinas requieren de una poda regular, de lo contrario, se enredaran sobre todo lo que esté a su paso.
Conocer cómo y cuándo podarlas es importante. Si bien la poda regular de los brotes se efectúa durante toda la temporada de crecimiento y ayuda a mantener la vid controlada, la glicina requiere una fuerte poda a finales de otoño o invierno; lo ideal es quitar toda la madera muerta y recortar bastante las ramas laterales, también se deberían quitar los retoños de la base.
¿Cuándo y Cómo podar las glicinas?
La glicina puede podarse varias veces al año, en función del objetivo deseado: floración abundante, formación de nuevos brotes, armonización de la silueta, control de la expansión.
También se puede podar en forma de árbol para convertirlo en un ejemplar aislado en el césped.
- En invierno, fuera del periodo de heladas: Poda los brotes laterales que se redujeron en verano, dejando sólo dos ojos (unos 10 cm de tallo) para estimular la floración.
- En marzo (Septiembre en el H.Sur): recortar los nuevos brotes para favorecer la multiplicación de los botones florales.
- Cuando se acerque el verano: recorta a 20 cm todos los tallos volubles mal orientados (que crecen hacia la izquierda cuando quieres conducirlos hacia la derecha, que apuntan hacia la pared, etc.).
- Una poda a 5 o 6 ojos al final de la floración permite controlar la expansión del ejemplar.
Poda de rejuvenecimiento
Para las glicinas de más de 10 años, es necesario cortar un tallo a ras de suelo.
Con el paso de los años, y para permitir un rejuvenecimiento progresivo, esta operación debe repetirse en los otros tallos, ya que permite que la glicina se ramifique y crezca en la base.
Más robusta, se encarga también de renovar otros brotes.
Podar la glicinia en forma de árbol
La poda de un árbol de glicinas requiere varios años de paciencia.
- El primer año, deja que los tallos vaguen por el suelo.
- Luego enróllalos, todos en la misma dirección, alrededor de una estaca para obtener un tronco recto.
- Poda las ramas y elimina las hojas que aparecen en la base del tronco.
- Deja que las ramas superiores crezcan, pero córtalas a los 2 ó 3 ojos para evitar que se caigan. El corte es justo por encima de un ojo que mira hacia arriba y hacia afuera.
Consejo: elige una estaca de no más de 2 a 2,50 m.
Enfermedades, plagas y problemas de la Wisteria
Las glicinas pueden ser atacadas por cochinillas y pulgones, que a su vez pueden provocar la aparición de fumagina.
Los suelos demasiado húmedos, además, provocan enfermedades radiculares como Phytophtora, Armillaria, Fusarium, que pueden originar la muerte de la planta.
Cochinillas
Estos insectos chupadores y mordedores están cubiertos por una especie de caparazón ceroso o pulverulento. Las hojas atacadas se vuelven pegajosas y se cubren de fumagina. Las partes de la planta infectada se secan.
- Pulveriza aceite de colza para sofocarlas y, como medida preventiva, evita los ambientes excesivamente húmedos en épocas de calor.
Tipos de cochinillas y como eliminarlas
Pulgones
Estos insectos chupadores de savia se reúnen en colonias y atacan las hojas y los brotes jóvenes. Estos últimos se enroscan y enrollan sobre sí mismos. Los depósitos de melaza en forma de gotas negras pueden provocar la aparición de fumagina.
- Eliminar las colonias con un chorro de agua o lavar el follaje con una solución de jabón negro.
Clorosis
La glicina puede verse afectada por la clorosis si se planta en un suelo calcáreo. En este caso, las hojas amarillean.
La fertilización con oligoelementos puede resolver temporalmente el problema. Sin embargo, si tu suelo es demasiado calcáreo, la clorosis volverá a aparecer y deberás constantemente estar haciendo aportaciones de quelatos para acidificar el suelo.
Una alternativa puede ser plantarla en un gran contenedor que te permita un mayor control sobre el sustrato
- Agrega periódicamente quelatos de hierro y oligoelementos. También podemos añadir sulfato de hierro o turba rubia para acidificar el suelo
Que es la clorosis y como combatirla
Otro problemas y enfermedades
Manchas en el Follaje
Pueden aparecer machas redondeadas y amarronadas y con puntos negros. El origen puede deberse a los hongos Phyllosticta sp., Septoria sp.
- Si tenemos la precaución de arrancar y quemar las primeras hojas que presenten manchas podemos muchas veces evitar la propagación de la enfermedad.
Oidio
Esta enfermedad aparece en condiciones de poca aireación y exceso de humedad ambiental.
- Evita los riegos excesivos y mejora la ventilación, si no mejora, debería tratarla con un fungicida.
Roya
La roya puede identificarse mediante la aparición de bultitos en las hojas de unos pocos milímetros de diámetro.
- Puedes prevenir el avance con fungicidas si se aprecian síntomas y repetir a los 15 días.
Agalla del cuello
El problema es suscitado por la bacteria Agrobacterium tumefaciens, que origina tumores o agallas en la zona del cuello de la planta.
- Lamentablemente no existe una solución efectiva y con dolor deberemos desechar la planta.
Multiplicación de glicinia
La glicina se puede esquejar, acodar o injertar. El método más interesante es el de los esquejes, que producen una planta que tardará 6 años en florecer.
Acodo simple
La acodación es el método de propagación más adecuado y práctico:
- Realiza la operación en primavera u otoño.
- Haz una zanja de unos 10 cm de profundidad, cerca de la planta madre.
- Elige una rama baja y sana.
- Colócala en el fondo del agujero.
- Haz un corte en la corteza y retira las hojas de la parte enterrada.
- Fija la rama enterrada en el suelo con ganchos y levanta el extremo de la rama en vertical, enganchándola a una estaca.
- Rellena el agujero con una mezcla de 50% de arena y 50% de turba.
- Riega y mantén la tierra húmeda.
- En otoño o en la primavera siguiente, comprueba si la rama ha echado raíces.
- Si ha enraizado bien, retírala cortando la rama del lado de la planta madre.
- Trasplántala con un cepellón para proteger las nuevas raíces.
Esquejes
El esquejado, una vez terminada la floración, es bastante fácil, se debe hacer bajo vidrio:
- Opta por un tallo sano sin flores.
- Corta la rama de 10 a 15 cm de largo.
- Elimina las hojas y los brotes laterales.
- Coloca el esqueje en una maceta con tierra para esquejes.
- Humedece sin empapar.
Injerto
El injerto es una forma fiable de propagar la glicina, que florece mucho más rápidamente que los esquejes. Sin embargo, esta técnica la utilizan principalmente los profesionales.
El injerto se realiza de febrero a marzo, según la región. El injerto puede hacerse en forma de incrustaciones o a la inglesa en un tronco muy corto.
No olvides eliminar los chupones (nuevos brotes) bajo el punto de injerto cuando aparezcan.
Tipos de Wisteria o Glicinia: Especies y variedades
Hay 10 especies de glicinas, aquí está nuestra selección.
Wisteria floribunda ( Glicina japonesa )
- Floración: De abril a mayo (octubre a noviembre en el H. Sur)
- Flores/Racimos: Racimos florales más largos pero menos densos y menos fragantes que los de China (20 a 40 cm de longitud).
- Cualidades: Variedad común de 10 a 15 m de altura. Muy resistente.
Wisteria sinensis ( Glicina china )
- Floración: De abril a mayo (octubre a noviembre en el H. Sur)
- Flores/Racimos: Flores fragantes que forman racimos largos y colgantes de 15 a 30 cm.
- Cualidades: Remontante en verano. Especie vigorosa, resistente hasta -15°C. Altura aproximada de 20 m.
Wisteria brachybotris ‘Shiro Kapitan’ ( sinónimo: Wisteria venusta )
- Floración: Mayo (Noviembre en el H. Sur)
- Flores/Racimos: Fragante y nectarífera. Racimos de 10-15 cm de longitud.
- Cualidades: Más frágil. Segunda floración en verano o principios de otoño. Altura: 10-15 m.
Wisteria floribunda «Domino» ( sinónimo: Wisteria x formosa «Issai»)
- Floración: Mayo (noviembre en el H. Sur)
- Flores/Racimos: Flores pequeñas, fragantes y muy numerosas, racimos ovalados y alargados de 18 a 25 cm.
- Cualidades: Floración duradera y precoz a partir de los 2 años. Adecuada para el cultivo en macetas o contenedores.
Wisteria frutescens ( Glicina americana )
- Floración: Fines de mayo – principios de julio (noviembre qa principios de enero en el H. Sur)
- Flores/Racimos: Flores fragantes y vellosas. Racimos muy compactos, en forma de embudo, de 18-20 cm de longitud.
- Cualidades: Altura de 2,5 a 4 m. Ancho de 2 a 3 m.
Wisteria macrostachya ( Glicina Kentucky )
- Floración: Junio – Julio (diciembre – enero en el H. Sur)
- Flores/Racimos:
Flores sin aroma en racimos de 15 a 30 cm de largo. - Cualidades :
Florece a partir de los 2 años. Altura 8 m.
Wisteria brachybotrys
- Floración: Mayo (noviembre en el H. Sur)
- Flores/Racimos: Muy fragante. Racimos colgantes de 10 a 15 cm de longitud que florecen todos juntos.
- Cualidades: Muy vigorosa. Altura: 6 m. Ancho 5 m.
Usos Exteriores:
- Balcón o terraza
- Plantación aislada
Dónde Plantar:
- En el suelo (plena tierra)
- En maceta (o contenedor)